No pude soportar
un día tan soleado
queriendo aparentar
que estoy bien a tu lado
de tuve que dejar
un cuchillo clavado,
justo en la yugular.
No quiero soportar
tu hipócrita sonrisa
ni quiero halagar
tus débiles espinas.
Sólo voy a agarrar
del mango una cuchilla
y te voy a matar,
muriéndome de risa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario