lunes, 29 de diciembre de 2014

Amargo pero dulce

Un sabor amargo
casi como mi alma
vieja y repudiada
con odio y sin calma.

Le he tomado gusto
quizás fue la costumbre
y ahora me da miedo
sentir como me hunde.

Hablo de aquel sabor
que no mata pero duele
hablo de aquel dolor
que me ofusca, cuando puede.

Y me deja sin temor
más tan sólo por un rato
ya que es tanto mi dolor
a su calma yo me ato.

Siempre quiero un poco más
nunca ha sido demasiado
esta calma y esta paz
me han dejado anestesiado.

Igual siempre me ha gustado
sentir algo, estar despierta
sentir dolor y alegría
y sentir, que no estoy muerta.



1 comentario: